Sergio Berrocal El único problema de aquel pueblecito francés es que era pobre aunque estaba situado al lado de pequeñas
Sergio Berrocal He tarareado un bolero, y no un tango, para poner punto final a unas novelillas (« Ojos verdes
Sergio Berrocal La dulce España de Carmen la enamorada y otras tonterías folclóricas se está convirtiendo en uno de los
Sergio Berrocal Casualidades de la vida, vida de casualidades. Dos minutos antes de que un muchacho sonriente y con toda
Sergio Berrocal Cuando la vida te abandona, cuando te arroja a lo lejos con el desprecio de un capitalista del
Sergio Berrocal | Maqueta Un cuerpo de mujer que se deja caer en un sillón de cuero con olor a
Sergio Berrocal La pantalla del ordenador me ha amanecido encharcada de pintura amarilla. Escribiré en el cuaderno azul a 0,70
Sergio Berrocal Vivo en una isla africana que pertenece a España, allá abajo donde termina Europa y con el mar
Sergio Berrocal Agarrado fuertemente a la almohada, escuchas a los Bee Gees, que desde siempre han sido aquellos muchachos que,
Sergio Berrocal Están a punto de desfilar los títulos de crédito. La banda sonora sigue ganándose la vida y te